martes, enero 02, 2007

¿ Será Posible?

Que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad.
Por Alexis Bastidas

La interpretación de este principio ha producido doctrinas que procuran el manejo de la conciencia y la conducta de los hombres. Usar a Dios como instrumento de dominación es tan antiguo como el hombre mismo.
La justicia en la vida es producto de la obediencia absoluta de de un ser cuyo imagen imprime terror en lugar de respeto. La certeza del castigo genera una cultura de manipulación. Donde la libertada esta sujeta a la sumisión del hombre a doctrinas de poder que niegan la existencia de Dios con capacidad de entender y dialogar con el hombre en sus circunstancias.
El mundo esta en llamas por usar a Dios como justificación de la violencia y de la guerra. Asesinar en nombre de Dios y la fe, sigue siendo la excusa perfecta de quienes pretende conquistar el mundo para si mismos.
La insistencia por establecer la felicidad del hombre fuera de la realidad es otra de las características de estas doctrinas. Ignorando que Dios quiere la felicidad del hombre siempre y en todo momento.
¿Cómo enfrentar este abuso?
· Estableciendo una distinción clara entre el Dios y el concepto de dios creado por las fuentes de poder para su beneficio. Dios es una vivencia personal que adquiere profundidad y sentido en la medida que el hombre conquista la plenitud de si mismo. Dios se revela como un ser dialogante, amoroso, generoso. No como un ser inmaduro, egoísta y agresivo que se complace en el sufrimiento y la tragedia de los hombres.
· Consiste en entender la salvación. Para lograr esto es necesario superar la idea de premio y castigo por el de sabiduría. De este modo se puede establecer con claridad de que se salva, porqué se salva y quien se salva. Pensar en el cielo y el infierno como categorías de futuro niegan al hombre la posibilidad de conocer quien es Dios en términos reales. El hombre entiende que Dios existe aquí y ahora.
· Establecer qué es religión y para qué fue creada. Quien es Dios y como ambos Dios y hombre se encuentran en la realidad. En principio las religiones procuran educar para la búsqueda y encuentro de Dios en la vida. Las religiones comparten la experiencia de Dios, pero no son dueños de Dios. La idea de pensar en las religiones como clubes donde la raza, la lengua y el estatus social determinan la salvación es primitiva y niega la total y absoluta libertad de Dios y por supuesto la del hombre.
· Establecer la verdad sobre el hombre y la búsqueda de la plenitud. De este modo lograremos entender el inefable gozo de la presencia de Dios en la vida. La humanidad podrá descubrir por sí misma que la vida de Dios no se resume en perseguir al hombre hasta condenarlo al absurdo. Dios es el punto de apoyo sobre el cual la humanidad alcanza la plenitud.